El Partido Popular nos sorprende, día sí y día también, con una chapuza tras otra. Esta vez nos referimos a la mala gestión e inexistente comunicación con los vecinos a lo que la colocación de contenedores nuevos se refiere, ya que de buenas a primeras los contenedores han desaparecido…
Actualmente, está en marcha el despliegue de nuevos y grandes contenedores de pedal para depositar la basura orgánica. Un hecho que desde Los Verdes vemos muy positivo. Pero no entendemos porqué no hay ningún tipo de información a través de la prensa local o las redes sociales de las que suelen hacer muchísimo uso los miembros del gobierno local a la hora de anunciar fiestas, conciertos y publicar fotos de inauguraciones y eventos similares.
No se han puesto en contacto con la ciudadanía en general, ni con las comunidades de propietarios, ni las administraciones de fincas o colectivos vecinales, incluso hay urbanizaciones y residenciales que disponen de juntas y órganos de representación que podrían haber trasladado a sus miembros de manera inmediata cualquier tipo de notificación. ¿Qué menos que informar de la fecha del cambio y las nuevas ubicaciones definitivas? Ni siquiera sus señalados delegados de barrio han ejercido como tal para avisar a los vecinos de los novedosos cambios y no dejarles en la total ignorancia, o tal vez sí pero entonces solo los amiguitos habrían tenido acceso a esa privilegiada información, que tampoco nos extrañaría nada.
Tan solo han colocado en las aceras unos cartelitos que no sirven para nada ya que ni a la luz del día se leen los nombres de las calles, y mucho menos después de las 20:00 horas que es cuando hay que hacer uso de los contenedores.
Así resulta que cientos de vecinos deben haberse quedado boquiabiertos en el momento exacto en el cual – con la bolsa de basura en mano – se dan cuenta que no está el contenedor en el cual depositan su basura, en ocasiones, desde hace más de 25 años. Muchas personas jubiladas o de avanzada edad, como es en el caso de Los Balcones (una de las urbanizaciones en la cual se ha iniciado este intercambio y cuyos residentes ya han interpuesto queja ante el ayuntamiento), resulta que se encuentran en la calle y en concordancia con una terrorífica escena propia de Halloween, con la tenue luz de las farolas, a merced de la plaga de los sanguinarios mosquitos, no saben si dirigirse calle arriba o calle abajo para encontrar uno de esos magníficos contenedores para deshacerse de sus residuos, así que ante tal confusión y entendible cabreo deciden dejar la bolsa en el mismo lugar en el cual se encontraba su contenedor habitual, pero claro, sin contenedor.
No se entiende si esta improvisación por parte del alcalde Eduardo Dolón y la concejala investigada Carmen Gómez Candel es a causa de las prisas para que “de la noche a la mañana” los ciudadanos se encuentren ante un hecho consumado el que ha provocado que se amontonen las bolsas de basura a la orilla de las calles, que menos mal que están siendo retiradas por el servicio de limpieza viaria que igual que los usuarios conocen perfectamente donde estaban ubicados todos los contenedores desaparecidos.
Se ve que la coordinación para conseguir un correcto despliegue del servicio no estaba contenida en el pliegue de condiciones del archimillonario contrato de basura, o posiblemente es que no les importe ni lo más mínimo con tal de que puedan hacerse la foto con los contenedores nuevos, o tal vez se despistaron al estar preocupados por alguno de los tantos asuntillos judiciales del PP.
Sea cual sea el motivo, se sabe de sobra que el contrato de las basuras, sea en Torrevieja o en otros municipios en el cual gobierne el Partido Popular, ha sido nicho de mucho mangoneo y mamoneo, y no olvidemos el amaño delictivo del exalcalde popular de Torrevieja Hernández Mateo por el cual fue a la cárcel que como dice el dicho “el pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla”, esperemos que la polémica adjudicación del contrato actual, con la misma empresa que antes, no termine de nuevo en un escándalo de corrupción.
Carmen Morate