Avanza un rebaño aprovechando los tiernos pastos invernales, guiado por los perros y siguiendo al pastor. El sinuoso camino destaca con el atardecer en la laguna de La Mata.
Vienen, como hace siglos, huyendo del frío desde las tierras altas del Maestrazgo de Teruel y Castellón. Vías ancestrales que en la Edad Media el rey Alfonso X el Sabio organizó en la todopoderosa Mesta o Consejo de Ganaderos.
Pocos saben que hasta bien entrado el siglo XX, los alrededores de las lagunas de La Mata y Torrevieja todavía albergaban miles de cabezas de ganado trashumante.
En su largo viaje por las serranías del interior, los rebaños pudieron sobrevivir al lobo gracias a los perros mastines y las carlancas que éstos portaban en sus cuellos. Sin embargo, fueron sucumbiendo lentamente a los modos de vida y producción ganadera modernos y, en nuestra zona, a los chalets y bungalows que surgieron sobre sus pastos.
Son los últimos representantes de una historia que esperemos podamos conservar viva, mientras reivindicamos culturalmente la Vereda de la Cumbre y la Cañada Real de la Costa, las dos principales vías pecuarias que atraviesan Torrevieja.
FUENTE: Crónicas Naturales de Torrevieja