
La muerte del perro de Nueva Torrevieja, es solo la punta del iceberg.
Puede sonar arrogante pero los que me conocen saben que si yo hubiera estado en Torrevieja, ese perro aún seguiría con vida.
Puede sonar arrogante pero los que me conocen saben que si yo hubiera estado en Torrevieja, ese perro aún seguiría con vida.
El equipo de Gobierno opta por este coeficiente por decisión personal de Eduardo Dolón, sin presentar ningún informe económico, cuando se podría haber optado por coeficientes menores.